Coca-Cola trae de vuelta su emblemática campaña “Comparte una Coca-Cola”, renovada para conectar con la nueva generación y celebrar la autenticidad de las relaciones personales. Lanzada por primera vez en 2014 en Ecuador, esta iniciativa revolucionó la industria al reemplazar el icónico logo con nombres propios, lo que permitió una personalización a niveles nunca antes vistos.
Ahora la campaña regresa con más nombres, nuevas formas de personalización y una invitación clara: compartir momentos especiales con quienes más quieres. Con el 72% de la Generación Z en búsqueda de conexiones auténticas, esta campaña ofrece una forma tangible de demostrar afecto. A través de las Estaciones de Personalización, los consumidores podrán imprimir etiquetas con sus nombres y los de sus seres queridos para crear botellas únicas que celebran la amistad y el cariño.
El relanzamiento incluirá activaciones especiales en ciudades como Quito, Guayaquil, Cuenca y Manta, así como en cinco universidades del país, con el objetivo de fomentar encuentros reales en medio de un mundo digital. Las botellas personalizadas están disponibles en puntos de venta desde la segunda semana de abril y los interesados podrán seguir todas las novedades a través del Instagram de Coca-Cola Ecuador.
Claudia Navarro, presidenta de Marketing para América Latina, destacó que “las personas son la base de la campaña” y que el objetivo es fomentar las conexiones a través de pequeños gestos que dejan huella.
En un mundo cada vez más acelerado y digital, esta iniciativa nos recuerda el valor de los pequeños gestos y de las relaciones genuinas. Más allá del Marketing, esta campaña celebra lo humano, lo cercano, lo real. Porque al final del día, lo que perdura no son los objetos, sino los momentos compartidos y las emociones que nos unen.
